viernes, 14 de enero de 2011

Capitulo 5





David y Fer se encuentran en el instituto. Fer besa a su chico con pasión. Lo nota tenso.
--¿te ocurre algo?
David se hace el que no pasa nada y trata a Fer como si estuviera loco.
--¡claro que no¡ ¡¡que tontería¡
--es que te noto raro.
David no le da importancia.
--Será que estoy mal por los exámenes.
Esta excusa sorprende mucho a Fer:
--¡pero si no tenemos exámenes¡
David va improvisando sobre la marcha:
--pero es que voy muy atrasado en varias materias y sino me espabilo ahora no apruebo.
Fer no queda muy convencido pero prefiere creerle a su novio. Van entrando al centro tomados de la mano. Tan cerca pero a la vez tan lejos. David está muy distraído. Van a entrar a la clase pero Fer le estira del brazo.
--Esto no puede seguir así.
David lo mira aturdido:
--epa ¿qué pasó?
David se apoya en la pared. Fer mueve mucho las manos, está nervioso. Le cuesta hablar.
--Es evidente que algo nos está pasando ¿es que me has dejado de querer?
David le va a decir que son imaginaciones suyas, que todo va bien pero ve a Fer tan preocupado, tan triste que siente que merece una explicación. Igual tampoco sabe qué le va a decir. Se siente culpable porque no puede dejar de pensar en el torero pero no tiene ninguna intención de dejar a Fer ya que ni él mismo entiende qué le está pasando. Duda que algún día vuelva a ver al torero, no hay ningún motivo para que su relación con Fer acabe pero se da cuenta que la está poniendo en peligro. David le pone las manos en las mejillas a su novio últimamente ha sido muy brusco con él y ahora se muestra cariñoso como siempre.
--cariño, no es tu culpa. Soy yo que ando distraído pero te quiero mucho. Te quiero como siempre.
David besa a Fer ardientemente para demostrarle que lo ama y lo desea pero Fer sigue atormentado. Siente que él es el culpable de que David lo está dejando de querer y eso le duele mucho.
--¿es porque no te apoyé lo suficiente el día que se dijo no a los toros?
Fer siente que es por eso y llora. David no se esperaba que Fer le dijera eso, que se sintiera mal por creerse culpable de algo. Sus lágrimas le hacen sentir una basura. Le seca las lágrimas muy amoroso y dulcemente le dice:
--¡pero si me apoyaste al 100¡ Estoy muy orgulloso de ti.
Fer habla con mucha tristeza.
--pero es que desde ese día todo ha cambiado con nosotros.
David no se puede sacar a Sebastián de la cabeza y eso le hace sentir fatal. Tiene claro que no va a permitir que Fer sufra por un sentimiento que David considera más propio de un adolescente. Abraza a Fer con fuerza.
--Eres un tonto, yo te quiero como siempre.
Lo va acariciando dulce y lentamente para darse tiempo a pensar una excusa, le viene de repente. Se le ilumina el rostro, se siente salvado. Se aparta de Fer y dice:
--es por lo de mi hermana, por todo eso que dicen que es una golfa. –él mismo está contento de la bien que le ha quedado la excusa y se reafirma en ella-- ¡¡si es por eso¡ me tiene mal.
David siente que se ha quitado un peso de encima por la excusa que se le ha ocurrido. A Fer igual no le cuadra del todo esa explicación:
--¡pero si tú siempre has dicho lo mismo¡
--bueno pero una cosa es que lo diga yo y otra los demás.
Fer se la va creyendo y David se muestra aliviado.
--¿cuánto tiempo llevamos juntos ?–va diciendo David afectuoso.
Para ambos es bastante tiempo y ninguno de los dos lo sabe con exactitud.
--Ni tú ni yo hemos estado nunca con otro, hemos nacido el uno para el otro. No te tienes que preocupar de nada que todo está bien –David.
--si pero hace días que ya no vienes a mi casa –dice Fer triste.
--pero puedes venir tú a la mía –le responde aunque es el propio David quien prefiere que sus encuentros sea en casa de Fer.
David se siente culpable pues se ha pasado los últimos días masturbándose pensando en Sebastián y ha descuidado a su novio, por eso se siente mal. David no se ha querido echar toda la culpa encima, que Fer lo hubiera podido ir a buscar pero si lo hubiera hecho, con lo pendiente que ha estado del torero, lo hubiera rechazado. David se muestra seductor:
--vengo esta tarde a tu casa y recuperamos el tiempo perdido.
Fer se pone muy contento porque ama a su novio pero también lo desea y estar varios días sin hacer el amor ha sido una tortura. Se devoran la boca hasta que llega el profesor.


(Álex Martínez es Esteban)

En otra aula, Emilia llega a clase muy contenta. Un chico la espera con una rosa. Ella suspira enamorada:
--Esteban…
Aunque no es especialmente guapo, ni tiene un cuerpazo espectacular sí tiene un gran corazón y eso es lo que hace sentir a la chica enamorada. Está segura que en esta ocasión el chico no le va a fallar. Algo tímido, él entrega la rosa a la chica.
--esto es para agradecerte la gloriosa tarde que pasé ayer a tu lado.
Emilia está entusiasmada:
--ha sido la primera vez que estamos juntos pero no la última, gracias a ti he sido muy feliz.
Esteban nunca pensó que se estrenaría con la chica más guapa del instituto, le parece casi un sueño.
--Te he comprado esto, es el cd que querías.
Esteban no se lo esperaba y se pone muy contento. Es ella la que lo besa porque él no se atreve. A Esteban le gusta ser la envidia de sus compañeros y Emilia no piensa en nada.
--he reservado una habitación en un hotel para esta tarde.
Esteban traga saliva, no espera volver a hacerlo tan pronto.





Mientras sus hijos menores están en la escuela, Emilio padre se divierte con Rachid. El chico se baña desnudo en la piscina mientras el hombre observa, también desnudo, desde la enorme terraza de su habitación. Aunque no está enamorado del joven disfruta mucho estando con el chico. Le gusta. Aunque Rachid llena su cuerpo y no su alma, aunque sepa que después se va a sentir vacío, a Emilio le gusta disfrutar del tierno cuerpo de ese joven tan guapo. Su juventud, su belleza lo tienen totalmente seducido. Le gusta ver como salta al agua, sus genitales moviéndose, como va nadando, como bucea, como salta en el agua. Rachid sale de nuevo de la piscina. Su cuerpo mojado y desnudo pone muy cachondo a Emilio.
--¡venga, sube ya¡
Rachid no se lo hace repetir. Le gusta estar en esa casa tan grande y comportarse como si viviera en ella. Sube por las escaleras que une la piscina al dormitorio.
--me ducho y ahora vengo.
Emilio observa cachondo ese cuerpo en movimiento, esa ducha, el guapo chico llenándose de jabón. Emilio ya no puede más. Entra en la ducha, se besan y hacen el amor ahí mismo. Es Emilio el activo. Luego en la cama el activo es Rachid. Quedan los dos desnudos y satisfechos el uno al lado del otro. Rachid enciende un cigarro. Sonríe contento. El maduro hombre es muy atractivo y la casa le gusta mucho. Siempre que están juntos, el chico sueña que el hombre le pide que no se vuelva a ir. Emilio, en cambio, siempre está triste después de hacer el amor. No deja de pensar en Marc. Muy seductor, Rachid se pone sobre su amante:
--¿porqué tan triste siempre que acabamos de hacer el amor?
Emilio se levanta de la cama, se pone el bóxers.
--¡vete ya¡
Se ha desahogado y ahora el joven le sobra. Rachid se levanta. Su cuerpo totalmente desnudo pretende seducir a su maduro amante. Lo abraza por la espalda.
--confía en mí ¿Por qué no me cuentas que te pasa?
Emilio se aparta de él. Se muestra brusco.
--¡te he dicho que te vayas¡
El chico se molesta.
--¡ya estoy harto que me trates como un objeto sexual¡
--pues si no te gusta no vuelvas.
Emilio no se muestra enfadado pero sí distante. Rachid decide irse para evitar empeorar las cosas. Se va molesto, triste, Emilio busca su foto de Marc, la observa acariciando los recuerdos del pasado.

Después de la comida, Emilia y Esteban se encuentran en un hotel. Se quedan desnudos luego que hicieron el amor. Ella se despierta antes que él. Lo observa mientras él sigue durmiendo.
--parece un angelito.
No es guapo ni tiene buen cuerpo pero la hace feliz y está segura que él no se burlará de ella.



Mientras Fer y David han hecho el amor. Fer está feliz. Aprovechando que Fer no quiere que fume en la casa, David se levanta. Se pone los bóxers y va a la terraza. No deja de pensar en Sebastián.
--tengo que olvidarlo –dice para sí—no puedo seguir así, no puedo poner en peligro una relación tan estable por una foto y encima de un asesino.
Apaga el cigarro que tira por la terraza y vuelve a la cama decidido a no volver a pensar en Sebastián.

Cuando David llega a su casa, quita el poster del armario.
--¡se acabó esta tontería¡
Deja el poster sobre la cama. Lo quiere mirar por última vez. Se pone cachondo mirando la ternura del rostro del torero, la belleza de sus genitales. Se toca el pantalón porque se le ha puesto bien dura. Finalmente se desabrocha los jeans. Se empieza a tocar.
--¡esto no es una infidelidad, es una tontería¡
Baja los jeans y los calzoncillos hasta las rodillas y se masturba de nuevo mirando la foto del torero.

2 comentarios:

  1. no soy de leer webnovelas gays, pero, le voy a dar una oportunidad a esta historia porque me parece interesante el mensaje de defensa a los animales que les dás (en contra de las corridas de toros).

    Lo que admiro mucho ese atrevimiento tuyo en mostrar tus pensamientos sin remordimientos, en ese estilo te envidio, porque todavía no me atrevo a mostrar mis sentimientos.

    Por cierto, Emilia está muy guapa (jejejeje). :)

    Saludos,

    Renzo

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  2. hola, que sorpresa ¡¡gracias¡
    bueno pues sí, ya sabes que a mi no me molesta decir lo que pienso y siento y menos si es detrás de un personaje de mi novela...

    en fin ya me dirás si sigues la novela porque el mensaje de la defensa de los animales pues se va olvidando y la novela se centra más en ¡¡que bueno está el torero¡ en fin ya sabes por donde siempre van mis tramas, aunque la historia de emilia tiene mucho peso y su personaje se relaciona con los hijos de gabriel corrado y grecia colmenares que son los pocos heteros de la novela.

    andrea duro es de fisica o quimica y me cae muy bien, el actor de mi anterior articulo (alex hernandez) dijo que era la que más guapa le parecía de la serie y es por eso que le di el papel a ella, ese actor tiene un pequeño papel aqui.

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